abrir al corvo arado sus besanas;
para el grano de Dios hay sementera
bajo cardos y abrojos y bardanas
¡Qué importa un día! Está el ayer alerto
al mañana; mañana al infinito;
¡hombres de España, ni el pasado ha muerto
ni está el mañana -ni el ayer- escrito!
El Dios ibero
Antonio Machado
El hecho de llevar el epíteto de menor ya nos indica que hay otro lampazo, el mayor. También el nombre científico lo lleva: Arctium minus (pero el lampazo mayor no es majus sino lappa). Sin embargo parece que no hay muchas posibilidades de confundirlas, más que nada porque el mayor parece ser muy escaso. A este respecto dice Font de Quer: El tal lampazo mayor es una de estas especies fantasmas que los mediterráneos andamos buscando toda la vida, siempre dudando de haberla hallado.
Por si cupiese aun duda decir que las cabezuelas de color purpúreo erizadas de púas no se encuentran sólo al final del tallo, como en Arctium lappa, sino que se van sucediendo a todo lo largo del mismo. Arctium procede del término griego para designar al oso, y haría referencia a la apariencia vellosa de la planta. Bardana no sabemos de dónde viene y lampazo vendría de lappa, que según wikipedia, y otros lugares que creo que se limitan a copiarla, quiere decir fresa. No me cuadra. Consultando varios diccionarios de latín en internet me dan la opción de espina, más acorde con fisionomía de la planta.
En cuanto a los usos que ha conocido han sido muy variados: para la forunculosis, como laxante, para afecciones hepáticas, para la gonorrea...Menciona Font de Quer sin embargo a dos autores que han estudiado en profundidad la planta concluyendo que todas las virtudes que se le atribuyen son "ilusorias". A modo de anécdota comentar que el botánico inglés del XVIII John Hill dedicó un estudio monográfico a las excelentes virtudes de la planta para el tratamiento de la gota. Pues bien fue la gota la que se llevó a la tumba a John Hill.
Una mañana de otoño,
cuando los campos se aran,
sobre un otero, que tiene
el cielo de la mañana
por fondo, la parda yunta
de Juan lentamente avanza.
Cardos, lampazos y abrojos,
avena loca y cizaña
llenan la tierra maldita,
tenaz a pico y a escarda
La tierra de Alvargonzález
Antonio Machado
3 comentarios:
Me encantan estas entradas. Besitos.
Si no me equivoco, creo que no, estos son los que de chiquillos y por mi tierra conocíamos como «pegotes» por la facilidad con la que se agarraban a la ropa con los ganchitos de sus púas. Con ellos hacíamos batallas por supuesto, bolas, cestas y otras figuras diversas pegando unos con otros.
Un abrazo,
Magníficas las fotos y también la información sobre la planta. Saludos.
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