Nuestra Señora de París
Víctor Hugo
El texto que encabeza la presente entrada procede de la edición que tengo en casa de Nuestra Señora de París (Alianza Editorial 2013). En otras ediciones que he consultado no aparece la celidonia (Ranunculus ficaria), sino la escrofularia. No se que aparecerá en la versión original, pero no está la cosa como para desperdiciar textos.
He intentado averiguar qué es eso de la pierna de Dios, mas no he encontrado nada. Pero podemos elucubrar. La escena transcurre en la corte de los milagros, zona de París donde se dan cita ladrones, prostitutas, mendigos...gentes en fin de mal vivir que durante el día simulan diversos males (cegueras, cojeras, úlceras, llagas...) con los que mover a la piedad para lograr una limosna, recuperando de noche, una vez ya en su barrio, milagrosamente, la salud. Los mendigos lo que hacen es pordiosear es decir pedir por Dios. De ahí sospecho lo de pierna de Dios: pierna de pordiosear. El mismo truco de la pierna llagada e inútil podemos encontrarlo en el Guzmán de Alfarache, donde por cierto también se nombra a la celedonia.