Se volvieron a ver. Ella llevaba zapatillas Converse de todos los colores y pequeños top a juego. Se acostaba temprano, no bebía alcohol, era vegetariana y le enloquecía el tofu. Lo comía dulce, salado, con confitura de arándanos o con setas negras. Le contaba la historia de los Estados Unidos y de la constitución.
Las ardillas de Central Park están tristes los lunes
Katherine Pancol
Dudo mucho que las setas negras con que acompañan al tofu en el fragmento que encabeza el post corresponda al Phellodon niger, conocido como hidno negro o diente negro, pues su carne es correosa y carente de sabor por lo qué aunque no sea toxico no tiene valor culinario.
Para quien sí tiene valor el hongo es para los pinos al pie de los cuales crecen. Entre los pinos y el hidno negro se desarrollan micorrizas, una forma de simbiosis en la que las hifas del hongo envuelven las raíces del pino y crean lo que se conoce como red de Hartig mediante la que se establece un intercambio entre el árbol, que le da al hongo hidratos de carbono y vitaminas, y el hongo, que proporciona a su vez agua y minerales.
4 comentarios:
What a curious and charming blend of quirky romance, culinary musings, and unexpected fungal science
Excelentes fotos y muy bueno el reportaje con tanta información.
Buen hallazgo el de estas setas negras y muy buenas fotos.
Mil besos.
Muy bonitas estas setas negras. Saludos
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